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julio 09, 2025

Albania, Santa María de Leusa: un tesoro oculto en el bosque

Santa María de Leusa, Virgen María, Albania - El Guisante Verde Project

Oculta entre las brumas que, con frecuencia, llenan de misterio los bosques que bordean el monte Dhëmbel, muy cerca de Përmet, la ciudad de las rosas, nos encontramos con Leusa (Leusë), Albania. Es una remota aldea de menos de 100 habitantes, cuyos orígenes no están plenamente definidos, aunque su rastro aparece en registros fiscales otomanos a principios del siglo XV. No ocurre lo mismo con la joya de Leusa, la Iglesia de Santa María, cuya fecha de construcción está bien identificada; data del siglo XVIII, aunque se levanta sobre otra edificación más antigua, del siglo VI. La fundación del pueblo asociada al culto mariano, se refleja incluso en el nombre elegido, Leusa, que deriva de la palabra griega Eleusa, Misericordiosa, una advocación profundamente asociada a la Virgen María en la tradición ortodoxa oriental.

Santa María de Leusa, pinturas bóveda, Albania - El Guisante Verde Project

La visita a la iglesia de Santa María es un privilegio, porque además de la recompensa artística que proporciona, es un lugar aun no invadido por el turismo de masas. Nosotros la visitamos hace algún tiempo, pero no ha cambiado el hecho de que hoy en día, las guías de viaje en español que hemos consultado, salvo una que le dedica un par de líneas, continuan sin mencionarla, incluida la auto proclamada guía más vendida de Albania… Sin duda, el accidentado acceso al pueblo ayuda a mantenerlo a salvo de multitudes.

Roberto camino de Santa María de Leusa, Albania - El Guisante VErde Project

Encontrar y disfrutar estos rincones escondidos va camino de ser un imposible. El turismo avanza de forma imparable en Albania, que en 2024 fue el primer país del mundo en cuanto al aumento del número de turistas, según datos de la OMT. En 2024 el número de visitantes que cruzaron sus fronteras fue de casi 12 millones, para un país que cuenta con menos de 2’5 millones de habitantes. Si en España hay zonas pidiendo a gritos reducir la presión turística, en 2025 parece que llegarán a 100 los millones de turistas que visitarán nuestro país, imaginad lo que sería con más de 200 millones, el equivalente de lo que ha ocurrido en Albania, el País de las Águilas, el año pasado.

Montañas de Përmet desde Leusa, Albania - El Guisante Verde Project
Relicario en el camino a Leusa, Albania - El Guisante Verde Project
Leusa, carteles informativos, Albania - El Guisante Verde Project
Martirio de Santos, Iglesia de Santa María de Leusa, Albania - El Guisante Verde Project

Retomemos el hilo de nuestra excursión. Llegar caminando a Leusa desde Përmet es una experiencia en sí misma, una travesía que añade un matiz de logro al descubrimiento. El camino puede hacerse en taxi, aunque le quita encanto al viaje. Dependiendo del ritmo, el esforzado paseo puede llevar entre media o una hora, subiendo por una entretenida pista de tierra, llena de agujeros y rocas sueltas. Lo mejor es tomarse con calma la tarea y disfrutar con las vistas, espectaculares, del valle del río Vjosa y las montañas que lo rodean. Nosotros realizamos la caminata por la tarde y fue un acierto porque en varios tramos del camino disfrutamos de una reparadora sombra; a pleno sol nos hubiera costado bastante más. Aún así, no nos cruzamos con un alma en todo el trayecto.

Santa María de Leusa, oculta en el bosque, Albania - El Guisante Verde Project

En un momento dado, descubrimos la iglesia, que parecía querer ocultarse entre el bosque y la bruma. Al entrar en las calles de Leusa, empinadas, estrechas, sin asfaltar y a menudo sin salida porque terminan en una casa, nos acompaña una sensación de quietud, un silencio solo interrumpido por el viento y el canto de los pájaros. ¿De verdad está habitado este pueblo? Parecía improbable, pero, afortunadamente, nos encontramos con un vecino, que nos acompañó a la puerta donde había que llamar para que nos mostraran la iglesia. Actualmente, la famosa puerta azul.

Leusa, calles, Albania - El Guisante Verde Project

Al llegar junto a la Iglesia de Santa María, nos encontramos con un pequeño edificio de piedra de dos plantas, tejado de pizarra y un pórtico (una construcción posterior a la de la iglesia), que recorre el lateral que mira al valle y al que se abre mediante una hilera de arcos; la imagen que ya habíamos contemplado desde la senda que da acceso al pueblo. El interior del pórtico está decorado con pinturas de escenas que representan santos y, probablemente, reyes. El olor a bosque, la humedad, lo impregnan todo. El mal estado de conservación de las pinturas, debido a las inclemencias del tiempo, la falta de mantenimiento y, sí, también aquí, de manera muy acusada además, el vandalismo, nos hacía temer lo peor antes de cruzar la puerta de acceso a la nave de la iglesia.

Santa María de Leusa, pinturas del pórtico, Albania - El Guisante Verde Project

La iglesia se comenzó a construir a finales del siglo XVIII y, como ya habíamos adelantado, reposa sobre los restos de una edificación anterior, del siglo VI, en época del emperador bizantino Justiniano I. Probablemente este hecho es el origen de algunas versiones que circulan por la web afirmando que las pinturas son de época bizantina; en realidad, los trabajos se realizaron con posterioridad a la construcción de la iglesia, a comienzos del siglo XIX.

Santa María de Leusa, pinturas reyes, Albania - El Guisante Verde Project
Santa María de Leusa, bautismo, Albania - El Guisante Verde Project
Santa María de Leusa, santos y reyes, Albania - El Guisante Verde Project

Lo cierto es que no nos importó, igual que no le importará al que atraviese la puerta de Santa María de Leusa. La iglesia es una verdadera joya, que necesita ser restaurada, y su visita, en nuestra opinión, debería estar mucho más regulada.

La planta de Santa María de Leusa se compone de tres naves, y todas están cubiertas por diversas cúpulas y bóvedas. El interior de la iglesia se encuentra completamente cubierto por pinturas que nos muestran escenas bíblicas, de la Virgen, Cristo, los Apóstoles y de las vidas y martirios de los santos. Se disponen sobre paredes, techos, arcos…, en un despliegue artístico lleno de color que dificulta centrar la mirada; es fácil sentirse un poco abrumado, a lo que ayuda el calor del verano y el olor a humedad e incienso. A pesar de ello, o tal vez gracias a ese ambiente especial, el tiempo vuela en el interior de Santa María; a cada paso nos paramos a contemplar un detalle que nos había pasado inadvertido solo un metro más atrás. Nos giramos sobre nosotros mismos y tenemos nuevos descubrimientos, nuevas perspectivas.

Santa María de Leusa, pinturas bóveda Jesucristo, Albania - El Guisante Verde Project
Santa María de Leusa, pinturas paredes, Albania - El Guisante Verde Project
Santa María de Leusa, pinturas santos, Albania - El Guisante Verde Project
Santa María de Leusa, detalle pinturas santos, Albania - El Guisante Verde Project

La iconografía de inspiración bizantina contribuye a la sensación de encontrarnos en un lugar muy antiguo, a pesar de que sabemos que no es así. El interior también puede observarse desde el segundo piso, otro aspecto interesante de este pequeño templo, aunque la vista se cierra en parte, al menos cuando nosotros la visitamos, con una celosía, lo que añade misterio a la visita, confiriéndole algo de clandestino.

Santa María de Leusa, segundo piso, Albania - El Guisante Verde Project
Santa María de Leusa, pinturas desde el segundo piso, Albania - El Guisante Verde Project

En el fondo de la nave, separando ésta del santuario, se encuentra un precioso iconostasio, tallado en madera de nogal, fechado en 1817. Las pinturas de Santa María se conservan con dificultad, algunas se muestran aún vívidas, con los rojos y azules que atraen la mirada; en otras, las señales del paso del tiempo y, sobre todo, de las malas condiciones derivadas de la humedad y las filtraciones de agua, son evidentes. Sería irónico que este tesoro artístico, que sobrevivió a la devastación que la aldea sufrió durante la II Guerra Mundial y a un férreo régimen comunista, además de algún incendio y saqueo, desapareciera en un momento en el que debería tener asegurada su conservación.

Iconostasio de Santa María de Leusa, Albania - El Guisante Verde Project

Un apunte extra: si en vuestro viaje por Albania incluís el Lago de Ohrid, os animamos a cruzar la frontera y visitar, en Macedonia del Norte la ciudad de Ohird y el Santuario de Sveti Naum, muy cercano. Ohird tiene un patrimonio cultural e histórico excepcionales, sin olvidar su rica gastronomía. Uno de los numerosos puntos de interés de esta pequeña localidad es la Iglesia de Santa Sofía, que es uno de los mayores complejos de pinturas al fresco de los siglos XI, XIII y XIV.

Santa Sofia de Ohrid, Macedonia del Norte - El Guisante Verde Project

Leer: "Ohrid, la Jerusalén de los Balcanes". La experiencia inmersiva que tenemos en Leusa, gracias a su pequeño tamaño y la profusión de pinturas, compite con este gran templo que ya tenía su aspecto actual en la primera mitad del siglo XI.

No podíamos terminar sin hacer una referencia a la pequeña ciudad que nos sirve de base para explorar la región del magnífico parque nacional Parku Kombëtar Bredhi i Hotovës: Përmet, conocida también con el evocador apodo de ciudad de las rosas. Encontrarse en el centro de una zona montañosa y abrupta, con la tercera altura del país, el pico Maja e Papingut, de casi 2500 metros de altura, en el macizo de Nëmërçka, rodeada de grandes bosques y surcada por múltiples ríos, como el Vjosa, uno de los ríos más salvajes y vírgenes de Europa, han convertido a Përmet en un punto de referencia para el turismo de naturaleza.

Përmet, parque nacional, Albania - El Guisante Verde Project
Rio Vjosa y Montañas, Përmet, Albania - El Guisante Verde Project
Përmet, ovejas por la carretera, Albania - El Guisante Verde Project

Aunque no hemos conseguido encontrar ninguna fuente fiable que lo corrobore, se dice que la ciudad toma su nombre de Premt, gobernante durante la Edad Media de la fortaleza que se alzaba sobre la gran roca que domina la villa. Ante la inminente derrota frente las tropas enemigas que asediaban la ciudad, prefirió arrojarse desde las murallas a caer prisionero. Puede que sea así como ocurrieron las cosas, o que, conocedoras de lo mucho que gustan las leyendas y lo héroes trágicos, sea sólo una invención para que la recordemos. En cualquier caso, Përmet es un buen campo base para nuestras visitas en la zona.

Santa Maria Leusa, pinturas bóvedas laterales, Albania - El Guisante Verde Project

Pasear por las calles de Përmet es un ejercicio interesante no por sus monumentos precisamente, sino porque es una ciudad poco visitada, aunque esto es algo que puede cambiar rápidamente, y sus habitantes hacen su vida ajenos al ir y venir de los turistas que deambulamos por las calles o nos dejamos ver, agotados, en las terrazas. Curioso resulta también constatar la impronta del urbanismo de estilo soviético, sobrio, pesado, que se impuso durante las décadas en las que Albania fue uno de los países más herméticos del mundo.

Santa María de Leusa, pinturas bóvedas, Albania - El Guisante Verde Project

Un elemento natural, la gran roca conocida como Piedra de la Ciudad, es el lugar más destacado de esta pequeña urbe y no es de extrañar porque Përmet fue casi totalmente destruida durante la II Guerra Mundial por los bombardeos de las tropas italo-alemanas. Aquí también los partisanos de Hoxha y Shehu consiguieron una gran victoria en 1943, lo que le valió a Përmet ser elegida como la sede del primer gobierno independiente de Albania.

Muy cerca de Përmet se encuentra otro de los lugares de visita obligada en un viaje por el sur profundo de Albania; es el puente otomano de Bënjë, construido en piedra durante el siglo XVIII, con una longitud de 30 metros y sus 7 metros de altura. Está catalogado como monumento cultural.

Puente Otomano de Bënjë, Albania - por El Guisante Verde Project
Baños Termales de Bënjë, Albania - por El Guisante Verde Project

El atractivo de este puente también reside en que se encuentra rodeado por los baños termales de Bënjë, Ujërat Termale të Bënjës, que se utilizan desde la antigüedad. Son aguas sulfurosas, que brotan a una temperatura de entre 22 y 28 grados, así que no os extrañéis por el olor peculiar de alguna de ellas. Los baños naturales son seis, cada uno con propiedades, al parecer, diferentes; desde tratamiento para la piel, a problemas renales o estomacales. En nuestro caso, tras un verano muy seco, había poca agua, tanto en los baños como en el río, aunque fue suficiente para que pudiéramos probar sus bondades.

Vista del río desde el puente otomano de Bënjë, Albania - El Guisante Verde Project

Un punto negativo es que, a pesar de que Përmet trabaja por convertirse en una ciudad más verde y limpia, la basura, en buena parte debida a los turistas que no se comportan aquí igual que en sus países, unido a un mantenimiento deficiente, es visible tanto en el parking del puente como en los alrededores de los diversos baños termales.

Cañón de Langarica, Albania - El Guisante Verde Project

Desde el puente otomano se accede al cañón de Langarica, Kanioni i Langaricës, que es uno de los más espectaculares de Albania; sus paredes relucen al sol y en los puntos más estrechos pueden alcanzar una altura de 150 metros. Se podía caminar por el cauce del río, aunque en algunas zonas había algunos palmos de agua que, a priori, no presentaban dificultad. Sin embargo, nos encontramos con un fondo fangoso que nos dejaba clavados y sin posibilidad de seguir adelante. Por otra parte, hay que recordar que en ocasiones y, sin avisar, la presa que se encuentra unos diez kilómetros más arriba abre sus compuertas, con el peligro que supone una repentina avenida.

Maribel en el Cañón de Langarica, Albania - El Guisante Verde Project

Hasta aquí esta incursión por uno de los lugares más remotos del sur de Albania, la aldea de Leusa y su magnífica iglesia repleta de pinturas murales e iconos y Përmet, con sus baños termales y su puente otomano. Esta zona montañosa y verde de el país de las águilas es un magnífico contraste y complementa las, cada vez más conocidas, playas de la Riviera Albanesa. El final del verano y el otoño pueden ser un buen momento para disfrutar de estos espectaculares parajes.

Leer: "Viaje por el Sur de Albania, primeras impresiones"

Playa de Ksimil, Albania - El Guisante Verde Project

junio 22, 2025

Descubre Fetsund Lenser: Patrimonio flotante de Noruega

Fetsund Lenser, Noruega, por El Guisante Verde Project

La visita a Fetsund Lenser es una de nuestras recomendadas excursiones de sol y playa desde Oslo  y también es un monumento cultural de Noruega. Se encuentra estratégicamente ubicado, donde el río Glomma, el más largo y el de mayor caudal de los ríos noruegos, se funde con las tranquilas aguas del lago Øyeren, en el municipio de Lillestrøm, condado de Akershus, a una media hora del centro de Oslo.

Fetsund Lenser, pasarelas, Noruega, por El Guisante Verde Project

Fetsund Lenser no es simplemente un vestigio del pasado, sino un auténtico tesoro arquitectónico y natural, una histórica ciudad flotante, un museo vivo y un centro vital para el estudio de los humedales. Acompañadnos en este viaje fascinante, desde las plataformas sobre las aguas al humedal de Nordre Øyeren.

Humedal de Nordre Øyeren, Noruega, por El Guisante Verde Project

Antes de seguir, una aclaración sobre el nombre de Fetsund Lenser. Fetsund se refiere al lugar (Fet), donde se forma un estrecho (sund), del río Glomma, que fue el enclave en el que se construyeron las instalaciones, actual museo. Lenser, plural de lense, en este contexto del transporte fluvial de la madera, se refiere a las estructuras flotantes, generalmente hechas de troncos o balsas unidas, que se utilizaban para el control, guiado y clasificado de los troncos que flotaban en el río.

mayo 14, 2025

Monasterio de Santa María de la Vid, historia viva de la Ribera del Duero

Monasterio de Santa María de la Vid, por El Guisante Verde Project

La imponente silueta del Monasterio de Santa María de la Vid se recorta sobre un paraje natural, a orillas del río Duero, muy cerca de Aranda, la capital de Ribera del Duero. A tiro de piedra y, por mencionar solamente algunos de los lugares más emblemáticos, se encuentran San Esteban de Gormaz, El Burgo de Osma y los parques naturales del Cañón del rio Lobos y el de las Hoces del río Riaza. La ubicación perfecta para huir de la ciudad combinando arte, cultura, enoturismo y naturaleza.

Monasterio de la Vid, naturaleza, por El Guisante Verde Project

La historia del Monasterio de la Vid nos situa en el primer tercio del siglo XII, cuando dos nobles castellanos, Domingo Gómez de Campdespina (hermano ilegítimo del rey Alfonso VII) y Sancho, miembro de la influyente familia Ansúrez, regresaron a Castilla tras su formación en Francia mediante las enseñanzas de la orden premostratense. La orden fue fundada en 1120 en la Abadía de Prémontré por Norberto de Xanten, siguiendo la regla de San Agustín.

Monasterio de la Vid, Iglesia, coro alto - El Guisante Verde Project

Sancho fundó Santa María de Retuerta en Valladolid y Domingo el Monasterio del Monte Sacro, en 1132. El cenobio primitivo se encontraba a un par de kilómetros de distancia del emplazamiento actual. Se dice que, durante una cacería, Alfonso VII encontró una estatua de la Virgen bajo una vid. El monarca, imponiendo la condición de seguir la regla de San Agustín, favoreció al monasterio desde el principio. Alrededor de 1160, la comunidad ya se había trasladado al lugar elegido por el rey. Desde ese momento, las donaciones fueron numerosas, en especial las provenientes de los portadores de la corona castellana.

enero 03, 2025

17 Años de El Guisante Verde Project. Seguimos, por los pelos, dando la lata

Doce meses más en la mochila y ya son 17 años de El Guisante Verde Project. Seguimos, esta vez por los pelos, dando la lata... El 2024 arrancó fuerte. Nos llevó directos y sin previo aviso a uno de esos viajes que nunca quieres hacer. Cuando pedíamos al nuevo año descubrimientos y novedades no imaginábamos que iban a ser en forma de un viaje no soñado. Tras muchas semanas en la UCI, donde cada día que se tachaba del calendario era una victoria, llegó el turno para la segunda parte del viaje: la rehabilitación, en el Hospital de Gorliz, que se levanta sobre la playa de esta pequeña localidad costera de Bizkaia. Este 2024, más que nunca, hemos disfrutado del mar, el sol y la arena, que también curan. En este viaje seguimos embarcados, ahora ya en casa, aunque sin perder de vista el litoral.

Durante estos meses, en especial los primeros, los peores, hemos contado con el imprescindible apoyo de la familia y los amigos, de los que estaban cerca, y de aquellos que también desde lejos nos daban ánimos para seguir adelante. Ha sido magnifico que tantos hayáis venido a Bilbao a vernos y, como se ve, alguno incluso a pasearnos.

octubre 31, 2024

Ruta al hayedo de Balgerri en Karrantza, el mas extenso de Bizkaia

El bosque de Balgerri, el hayedo más extenso de Bizkaia, es una muestra más de la enorme biodiversidad vegetal de Karrantza. Además de hayas, encontraremos robles, alisos, fresnos, tejos o acebos. El bosque se encuentra en la ladera norte del monte Balgerri, uno de los balcones de Bizkaia, en la sierra de Ordunte, atravesado por el río homónimo.

La ruta parte del barrio de Lanzas Agudas, llamado así por las lanzas de fresno que fabricaban sus habitantes, junto a la casa rural Gailurretan. Un poco antes de llegar encontraréis un cartel informativo de la sierra de Ordunte. El aparcamiento está complicado, tal vez el mejor espacio sea junto a los restos de la antigua iglesia de San Miguel, en la parte alta del pueblo, por lo que deberéis descender un poco para tomar el sendero.

Una vez en Gailurretan, seguimos por el camino que asciende, enfilando hacia el monte. Nosotros lo hicimos acompañados por Pintxo, el perro de la casa rural, que nos marcó una ruta que él había realizado muchas veces. Tras poco más de medio kilómetro llegamos a un cruce con un cartel que señala, hacia la izquierda, el hayedo. Cuando realizamos el sendero no había llovido, por lo que no tuvimos saltos de agua en el recorrido.

octubre 16, 2024

Yoshitomo Nara, el arte desde la mirada de un niño

Yoshitomo Nara - Flor Muerta Remasterizada 2020, por El Guisante Verde Project

¿Quién es Yoshitomo Nara? ¿Por qué el Museo Guggenheim Bilbao le dedica una retrospectiva, la primera en Europa? ¿Qué nos quieren contar esos niños de enormes ojos que el artista dibuja durante desde hace casi 40 años?

Día lluvioso, gris, muy del Bilbao de antes, es el que elegimos para entrar al Museo Guggenheim Bilbao. ¿Qué pensaran las niñas protagonistas de la obra de este artista japonés cuando estos “ojos redondos” que pasean por las salas las miran con asombro?

Museo Guggenheim Bilbao - Exposición Yoshitomo Nara, por El Guisante Verde Project

Entramos a echar un vistazo, igual que a menudo hacemos con nuestros viajes, venimos a hacer una primero una visita panorámica y determinar el tamaño de la muestra, el tiempo que vamos a necesitar para disfrutarla. Esta vez, esos ojos grandes, casi siempre de niñas, las apodadas Nara Girls, nos interpelan desde dibujos, lienzos y esculturas, y cambian nuestros planes.

Yoshitomo Nara - Tras la Lluvia Ácida, por El Guisante Verde Project
Yoshitomo Nara - Blankey, por El Guisante Verde Project
Yoshitomo Nara - Rock You, por El Guisante Verde Project

Yoshitomo Nara es un artista japonés, viajero, afable, aunque con fama de solitario, que crea su propio lenguaje, en apariencia muy sencillo y fácil de descifrar. Desde su Hirosaki natal escuchaba música en inglés de una emisora americana, en una radio que él mismo construyó de niño. Crea y dibuja a partir de las sensaciones y emociones que esa música, que no entiende, provocan en él. Compró su primer disco en 1967 y es, desde entonces, un apasionado coleccionista. Todo lo que encontramos en las salas nos lleva a pensar en él como un niño, es extraño imaginarlo como un hombre de más de sesenta. ¿No ha crecido o es que la mirada de un niño es más directa para exponer sus ideas, sus anhelos, sus miedos y sus críticas?

La información de las salas, con palabras del propio Nara impresas en las paredes, la división en áreas temáticas, que no cronológicas, nos ofrece el contexto para identificar los códigos del artista japonés, que él mismo ha supervisado junto a la comisaria del museo, Lucía Agirre.

septiembre 30, 2024

Estados Unidos de Costa a Costa: Ruta de la hamburguesa y la cerveza

Manada de Vacas, Estados Unidos - El Guisante Verde Project

En Estados Unidos de Costa a Costa, ruta de la hamburguesa y la cerveza viajaremos por algo así como la Ruta 66 de la comida rápida, desde Nueva York a California. En Estados Unidos existe una gran variedad de locales que incluyen las hamburguesas en sus cartas como bares, restaurantes o diners. No obstante, la mayoría de ellos, ofrece también diferentes opciones gastronómicas, como platos tradicionales de la cocina estadounidense, muchos realmente contundentes, dispuestos en la mesa con la misma velocidad que una hamburguesa y que, a menudo, compensa con creces elegir. En los locales que recogemos en este artículo, al menos en la mayoría, también se ofrecen opciones veganas, incluidas hamburguesas.

La gastronomía de Estados Unidos es una gran desconocida y suele caerse en el tópico, como vamos a hacer nosotros mismos redactando estas líneas, somos conscientes de ello; aunque también debemos recordar nuestro anterior artículo dedicado a la cocina estadounidense: "12 Restaurantes de Estados Unidos donde no echarás de menos a tu madre".

New York Kitchen - Estados Unidos, por El Guisante Verde Project

En ese artículo mostramos una pequeña selección de los muchos lugares que hemos conocido en nuestros viajes por USA y que rompen con la sensación de que el único alimento del viajero por estas tierras consiste en hamburguesas, hot-dog y bebidas de cola. Algunos de aquellos 12 restaurantes aparecerán de nuevo aquí, en su versión más fast-food, aunque, una vez más, no os dejéis llevar por las apariencias.

A pesar de nuestros numerosos viajes a Estados Unidos durante una década, escribir este artículo no ha sido una tarea sencilla. Las diferentes crisis, monetarias y sanitarias, los cambios de hábitos también, han provocado el cierre de muchos locales, cervecerías en su mayor parte, que teníamos en la libreta. Especialmente catastrófico ha sido lo ocurrido en la Costa Oeste, donde ninguno de los que habíamos pensado incluir en un primer momento se encuentra ya operativo, como el Fat City de la parte histórica de la capital de California, Sacramento, conocida como Old Sacramento; un precioso local con decoración modernista, que cerró sus puertas tras más de 40 años de actividad y haberse convertido en un icono de la ciudad.

Fat City Restaurant, Old Sacramento - Estados Unidos, por El Guisante Verde Project

Parecida suerte ha sufrido el Fog City Diner de San Francisco, donde comimos una espectacular clam chowder. Abierto en 1985, con aspecto de restaurante de los años treinta en un reluciente vagón de tren, llegó a convertirse en una seña de identidad culinaria y estética de la ciudad californiana. Actualmente ha perdido el apellido 'diner' y el interior, moderno y simple como su carta, es una muestra de hacia donde evolucionamos como sociedad. También en la Costa Este ha habido muchas bajas, aunque destacamos dos. La primera, el Empire Brewing Company de Syracuse, Estado de Nueva York.

Empire Brewing Company, Syracuse - Estados Unidos, por El Guisante Verde Project

Fundada por David Katleski en 1994, rápidamente fue conocida por sus cervezas artesanas y por sus menús de temporada. En 2016 inauguró una nueva planta de elaboración de cerveza y una gran explotación agrícola convirtiéndose en la mayor micro cervecería de la costa este. Años después, la imposibilidad de hacer frente al endeudamiento la han llevado al cierre. En la Gran Manzana se echa de menos a Heartland Brewery. Fundada en 1995 por Jon Bloostein, su local de Union Square, donde se elaboraba la cerveza, fue rompedor. El éxito y, tal vez, la apertura de nuevos locales en los puntos más turísticos de la ciudad de Nueva York le llevó a perder parte de su esencia. Finalmente, los costes de los alquileres y otros elementos como las restricciones por la pandemia de 2020 han terminado por provocar la desaparición de la compañía.

A pesar de todo, lo cierto es que, desde hace algunos años, Estados Unidos vive un auténtico boom en lo que se refiere a la fabricación y distribución de cerveza a pequeña escala; las micro cervecerías triunfan, especialmente en la costa este y centro del país. Nos encontraremos en cada estado con cervezas propias, endémicas casi, con producciones modestas y una distribución local, aunque algunas otras ya se expanden a lo largo y ancho del país. Son las cervezas artesanas, craft beer, que en Estados Unidos nacieron en la década de los 70 del siglo pasado, bebiendo de la tradición europea que, desde hacía siglos, elaboraba cerveza de forma artesanal. Si os gusta esta bebida, Estados Unidos debe ser, también, una referencia para vosotros.

Pumpking imperial ale - Estados Unidos, por El Guisante Verde Project

Las cervezas de temporada son numerosas; una de las más sorprendentes que hemos probado es la Pumpking, de calabaza, imperial pumpking ale. Entre ligera y media, es la cerveza perfecta para la noche de Halloween y es una de las creaciones de la Southern Tier Brewing Company. La empresa fue fundada en 2002 por Phineas DeMink, Sara DeMink y Allen “Skip” Yahn en los bosques a las afueras de Lakewood, Estado de Nueva York. Desde entonces la marca no ha dejado de crecer, creando incluso una destilería, tanto en producción como en el número de estados a los que surten. También han abierto varios locales en Ohio, Nueva York, Pensilvania y Carolina del Norte.