Lysefjord significa fiordo de la luz, y hacia allí nos dirigimos desde el puerto de Stavanger en una de esas excursiones que combinan barco, autobús, antes de iniciar el ascenso al Preikestolen, privilegiado balcón que ese asoma a este fiordo.
En nuestra entrada Stavanger, los dos púlpitos de Noruega, ya nos referíamos a este saliente rocoso que se eleva 604 metros en vertical sobre el mar, y amenaza con separase en cualquier momento de la pared a la que se une, debido a la enorme grieta que lo recorre. Algo que, inevitablemente, ocurrirá algún dia y según la leyenda será cuando siete hermanas se casen con siete hermanos.