Slider

Estaciones Fantasma en Berlin. El Muro bajo el Muro Caminando por Berlin nos encontramos, casi sin quererlo, con los restos de una enorme cicatriz que la recorre. Hoy paseamos libremente ...

febrero 07, 2014

Estaciones Fantasma en Berlin. El Muro bajo el Muro

huidas-east-side-gallery

Caminando por Berlin nos encontramos, casi sin quererlo, con los restos de una enorme cicatriz que la recorre. Hoy paseamos libremente por sus barrios, atravesando a nuestro antojo una y otra vez esa cicatriz, solo una marca en el suelo testigo de lo que fue, un muro infranqueable para muchos, Nos resulta inevitable imaginar la impotencia sentida al no poder cruzar una calle o al tener que subir a un lugar elevado para saludar a los tuyos al otro lado; las miles de tragedias personales, y colectivas, que transcurrieron entre sus paredes.

Bernauer Strasse, frontera del muro

En lugares concretos, convertidos hoy en punto de encuentro obligado para los viajeros, como la East Side Gallery, el muro que dividía a la ciudad y separaba a sus habitantes, aparece en toda su dimensión ante nuestros ojos. Sin embargo resulta más sobrecogedor en otros, como Bernauer Strasse, donde, alejados de muchedumbres, nos detenemos junto a una pared vertical de hormigón armado sin llegar a comprender el sinsentido de algunas acciones humanas. Este año se conmemora el 25 aniversario de la caída de ese muro, que separó no solo a los berlineses, sino al mundo entero.

Memorial Wall, Berlin

Es curioso como siempre que visitamos un destino, son muchas las informaciones, conexiones, lecturas, películas, estudios, que previamente ya nos lo han presentado, y aun así, debemos dejar espacio para lo inesperado. Una de las sorpresas que nos tenía reservadas Berlin ha sido descubrir la historia de sus estaciones fantasma, el muro bajo el muro.

Su metro, hoy centenario, aún no se había  recuperado de los estragos causados por la segunda guerra mundial cuando se convirtió en protagonista de la ciudad dividida.

El Muro bajo el Muro. Metro de Berlin

Si la construcción del muro tomó por sorpresa a los habitantes de Berlín, saber que bajo el subsuelo los trenes seguían circulando suponía una tentación de fuga demasiado grande. Conscientes de ello los policías del pueblo irrumpieron también en las estaciones fronterizas la noche del 12 de agosto de 1961, enviando a sus casas a los trabajadores del Oeste, amurallando y tapiando estas estaciones de tránsito.

Dos líneas de la U-Bahn, la U8 y la U6 fueron cerradas, al igual que una línea del S-Bahn. Estas líneas atravesaban Berlin oriental en su recorrido entre dos secciones de Berlin occidental.   La RDA hizo pagar muy caro a Berlin oeste el privilegio de permitir a sus trenes circular por su territorio, recaudando  gracias a ello decenas de millones de marcos.

Ackerstrasse, Berlin

La excepción fue Friedrichstrasse, que se convirtió en la única estación  en la que era posible apearse de los trenes que cruzaban el Berlin dividido, un puesto fronterizo muy vigilado en el que se aprovechaba para ofrecer artículos de consumo y algunos de lujo de la RDA a los ciudadanos del sector occidental, y que no ha logrado el protagonismo del hoy tan turístico Check Point Charlie.

La estación Nordbahnhoff acoge una exposición sobre estas estaciones fantasma, con estremecedoras fotografías. ¿Qué pensarían, sentados en sus vagones, los habitantes del Oeste mientras el tren reducía su velocidad al atravesar, sin detenerse, estas estaciones selladas? ¿Y los ciudadanos del Este, que sabían que ese tren podía llevarles al otro lado? ¿Qué sucedería en un enfrentamiento allá abajo, tendrían alguna oportunidad? En el interior de los túneles el efecto de los disparos no sería fácil de controlar.

Underground Wall

Algunas estaciones desaparecieron completamente de la superficie, como si nunca hubieran existido. En otras, los muros construidos formaron un complejo sistema de barricadas, creando mundos separados. Por ejemplo, en Alexander Platz el muro construido para bloquear al acceso a la U8 creó un pasillo para acceder a las líneas 2 y 5, en el que nada hacía sospechar que al otro lado había una estación por donde circulaba una línea del oeste.

Ya os hablamos de la obsesión por la vigilancia de los ciudadanos por parte del gobierno en Ostalgia, un viaje al Berlin de la RDA, de las tétricas dependencias de la Stasi, donde incluso guardaban la ropa de los sospechosos para tener su olor y poder enviar perros en su persecución en caso de fuga.

Es en la estación Gartenstrasse, en el Berlin Memorial Wall, donde uno puede revivir las historias de familias divididas, a lo largo de la Bernauer Strasse, ver las torres de vigilancia, el espacio abierto, la llamada Franja de la Muerte, que debían atravesar aquellos que intentaban huir. Aquí tiene unos 30 metros de anchura, aunque en zonas como Potsdamer Platz, llegaba a los 500m.

Franja de la Muerte, Berlin Wall

En los primeros días de la construcción del muro, la precipitación y la improvisación, hicieron que las casas formaran parte de la frontera. Cuando la población comprendió lo que estaba ocurriendo ya era tarde. Las imágenes de personas saltando por las ventanas, en un intento desesperado por escapar de su encierro, dieron la vuelta al mundo. Ante esa situación, la autoridades de la RDA decidieron tapiarlas. Finalmente, fueron derruidas.

Casas-Frontera Berlin Wall

Nos causa desolación encontrarnos dentro de estas casas, cuya planta y division interior aparecen delimitadas en el suelo. Pasamos de la cocina al salón, al dormitorio, mirando hacia el frente e imaginando a nuestros seres queridos allí, al alcance de la mano, y sin embargo, infinitamente lejos. Si algo pone una nota de esperanza son las marcas con las que nos señalan los diferentes intentos de fuga, los llamados túneles de escape.

Tunel de Escape, Berlin

Alcantarillas selladas, estaciones fantasma vigiladas, aparatos para detectar el sonido de posibles excavaciones, delaciones, campos de minas… todo con tal de obstaculizar la salida de ciudadanos de Berlin Este. En definitiva ese fue el principal motivo para levantar el Muro de la Vergüenza. La fuga más famosa de las casi 40 documentadas es la llamada Operación Topo, en 1972, en la que tres jóvenes consiguieron huir, siendo descubierto el túnel apenas unos instantes después de su salida por el distrito de Kreuzberg. Faltaban todavía muchos años para la caída del Muro en 1989.

Ante el Muro de Berlin

Son muchas las historias que esconde el subsuelo berlinés, y no sólo de la época del Muro. Desde Treptow a Neukolln un túnel de unos 450 metros se convirtió en el campo de operaciones conjuntas de estadounidenses y británicos, la llamada Operación Oro, aunque ignoraban que entre sus filas existía un topo que puso sobre aviso a la KGB. La operación consistía en intervenir las líneas telefónicas e interceptar los mensajes de la Unión Soviética. Como muy bien relata Ian McEwan en “El Inocente” es otra de las absurdas historias de la Guerra Fría, donde la obsesión por la vigilancia, el contraespionaje y la desinformación, mantenían a los agentes ocupados en escuchas rutinarias sin ningún valor. Los soviéticos descubrieron el túnel y lo mostraron a los medios de comunicación en 1956 para mostrar al mundo como el bando aliado incumplía los tratados.

Berliner Unterwelten es una asociación que estudia, conserva y ofrece visitas guiadas a los espacios subterráneos de Berlín. Otra forma de acercarnos a las capas de su historia.

Bernauer Strasse, Berlin

20 comentarios :

  1. Guisantes con esta entrada nos habéis dado la vuelta como a un calcetín. Acostumbrados a fotografías y relatos como un bálsamo, este post nos dice que las guerras frías, o armadas siempre serán un horror. Y desgraciadamente el horror no termina con el fin de las batallas. Un beso grande.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja, Los tiramillas igual inauguramos sección, dar la "vuelta al calcetín". La estancia en Berlin nos ha calado en muchos sentidos, inevitable que parte de ello se filtre aquí.
      Un abrazo ;-))

      Eliminar
  2. De vuelta por los blogs amigos, he llegado a los guisantes. Después de más de dos años, regresé con un blog, que me imagino que les gustará porque tiene que ver con viajes y lugares, así que los espero por allá.
    Esta entrada es para mí significativa, porque viví en Cuba más de 50 años y sé muy bien lo que es la familia dividida, acá por 90 millas de agua, o lo que es lo mismo, menos de 30 minutos en un avión. Crecí oyendo historias del muro de Berlín, para nosotros, la RDA eran "los buenos", así nos lo hicieron ver, sin hablar nunca de la fragmentación y la tristeza en que vivieron durante años tantas familias de ambos lados. Las historias son desgarradoras, y el muro de Berlín viene a confirmar la frase de Einstein: la estupidez humana es infinita.
    Los recuerdo mucho. Los espero.
    Un abrazo
    Adela
    (ahora en Miami)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Adela!! que ilusión tener de nuevo noticias tuyas, y más en una entrada como esta que revive parte de tus recuerdos..
      Te hacíamos en Houston.. iremos a visitarte a vivirenflorida
      Un abrazo muy fuerte ;-))

      Eliminar
  3. Tanto la visita a la estación fantasma que mencionais como las visitas guiadas de Belín bajo el suelo son espeluznantes. Ambas me tocaron cuando visitamos la capital alemana. Cómo de un día para otro los berlineses se vieron separados, no pudiendo ir a trabajar, familias rotas... estremecedor.
    Hay que conocer la historia para que nunca se repita. No se trata de buenos ni de malos, se trata de personas y almas rotas en ambos lados.
    Un abrazo,

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Libreta Viajera No podemos estar más de acuerdo con lo que comentas. Es tremendo imaginar que así, de pronto, toda tu vida cambia, y en muchos casos, para siempre, sin saber por qué, sin poder hacer nada. La verdad es que impresiona muchísimo.
      Un abrazo!

      Eliminar
  4. Una ruta de lo más interesante, nosotros también realizamos un tour con Berliner Unterwelten y salimos realmente sorprendidos, sobre todo de los detalles que te dan y que si pasas por allí no te hubieras percatado en mirarlo.

    ¡Saludotes!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jose Carlos DSLa idea del muro bajo el muro era algo que teníamos muy presente ya antes de ir a Berlin, así que el recorrido fantasma estaba en nuestra hoja de ruta. Es algo en lo que muchas personas no se para a pensar, porque al estar oculto pasa desapercibido. Por eso creemos que es bueno no quedarse siempre en la superficie de las cosas. Para nosotros, y creo también para vosotros, una experiencia a recomendar.
      Un abrazo!

      Eliminar
  5. Aunque la historia no se olvida en Berlín y aunque la mayoría del horror allí vivido no esté físicamente presente, es cierto que ... hay una especie de aura o algo en el ambiente que te traslade a una época diferente.
    Lo bueno es que Berlín ha salido re-inventarse ... progresar, modernizarse, ... aunque siempre lo hará bajo la sombra del muro.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es cierto Alfonso the wotme actualmente la ciudad alemana está en pleno proceso de transformación, y al menos en este año de conmemoración el muro sigue muy presente, el próximo año toca conmemorar la reunificación; ¿qué tendrá mayor protagonismo en el futuro? habrá que estar atentos y volver para comprobarlo, ¿no?
      Un abrazo ;-)

      Eliminar
  6. Cuantas historias guarda Berlín, casi todas ellas tristes y vergonzosas. Pero por eso mismo me encanta Berlín, por ver como ese pasado turbio lo han convertido en un presente claro. Una ciudad imprescindible y con una magia dificil de igualar. Abrazos queridos amigos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Fran Soler es de verdad una ciudad que atrae, y creo que esa dificultad para abarcar todas sus historias, para descubrir todas sus aristas es parte de su magia.
      Un abrazo muy grande, de los dos guisantes ;-))

      Eliminar
  7. Gracias por descubrirnos un montón de sitios que no aparecen en las guías ;-) ¡Un abrazo fuerte!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Marta gracias por el piropo, aunque en una ciudad como Berlin es difícil descubrir algo que no se haya contado ya. Hay muy, muy buenas guías sobre la ciudad y lo hemos pasado en grande leyendo, contrastando, explorando, no sólo en redes, el papel nos gusta mucho.
      Un abrazo ;-))

      Eliminar
  8. La verdad es que esta parte de la historia pone los pelos de punta!! No sabía de la existencia de estas estaciones! Me lo apunto para la próxima visita a Berlín! La verdad es que me quedé con ganas de hacer cuando estuve en Berlín una de esas visitas que organizan los Berliner Unterwelten.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. siempre hay que dejar algo para la próxima visita, ¿verdad?, todas las perspectivas desde las que uno puede vivir Berlin resultan interesantes, y necesitamos equilibrar entre estas más oscuras en su historia y otras más luminosas, que Berlin tiene una oferta para volver una y otra vez.
      Un abrazo ;-)

      Eliminar
  9. Qué bien leeros...¡¡tenía tantas ganas!! Siempre viajo mucho con vosotros y ciertamente, este es uno de los destinos que tengo pendientes. En este caso, habéis viajado no solo a la ciudad actual, sino a la que hubo...a la ciudad dividida, a los horizontes sellados por una historia que jamás querríamos haber contado.
    Como bien decís, las películas y los libros se solapan en la historia, y parece que tienen su reencuentro allí.
    Imagino que habéis visto goodbye lenin...mientras os leía, pensaba en cómo se debieron de sentir...en las dificultades que habría y en esos muros "invisibles" que creo que aún permanecen...
    Gracias, con vosotros...me he sentido viajando por el mundo un domingo por la mañana...y gracias también por compartir las fotos...son estupendas, y dan visibilidad a todo lo que decís.
    Un placer como siempre, compartir momentos viajeros...Besos!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Maria que bien llevarte de viaje con nosotros, jejeje. Hemos vuelto a ver antes y después varias estupendas películas, en las que tratan esta etapa está por supuesto "Goodbye Lenin" y "La vida de los otros", que muestra la cara más cruda de la RDA. Indagando en la época tras la caída del Muro, también he leído "Algún día nos lo contaremos todo".

      Lo cierto es que daría para más de una entrada hablar de películas y libros que narran los hitos de la ciudad de Berlin . Me ha gustado bucear en el Berlin previo a la segunda guerra mundial con "Una princesa en Berlín".. tal vez algún día hablemos de ella, con una taza de te.. un abrazo ;-)

      Eliminar
  10. Muchas gracias por esta historia.
    Es increíble a donde puede llegar el ser humano, tanto para bien como para mal.
    Esa ciudad es un claro ejemplo de convivencia, con todo lo que tuvieron que sufrir durante años.
    Abajo los muros y alambradas!
    Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo suscribimos, Maria Grau, muros, alambradas, fronteras... solo sirven para que unos pocos vivan cada vez mejor a costa de todos. Recorrer estos lugares por Berlín es realmente una experiencia necesaria.
      Saludos!

      Eliminar

Déjanos un comentario, es gratis y sienta genial